Cámaras de Congelación de Alimentos y Conservación

Las cámaras de conservación y congelación de alimentos son espacios diseñados específicamente para contener y mantener unas condiciones de temperatura concretas y lograr un perfecto mantenimiento de los alimentos y que estos se encuentren seguros y saludables. Por ello, la principal diferencia entre las cámaras de congelación y las cámaras de conservación es su temperatura interior. Que se encuentra por encima de los 0ºC para las cámaras de conservación y por debajo de 0ºC (temperatura negativa) para cámaras congelación.

En cuanto a los alimentos almacenados en una cámara de conservación, serán alimentos frescos, con un tiempo de consumo relativamente corto, mientras que los alimentos congelados y almacenados en una de las cámara de congelación tendrán un periodo de almacenamiento más largo. En ambos casos, es importante preservar el mantenimiento de la cadena de frío para garantizar la calidad y propiedades de los alimentos.

Las cámaras de conservación o congelación de alimentos suelen tener unas características muy bien definidas que son, sin duda, la base para lograr una adecuada conservación de alimentos u otros productos:

• Aislamiento y estanqueidad: Para que las condiciones dentro de la cámara sean las más óptimas y estables posible, es primordial que las pérdidas de temperatura por transmisión sean mínimas y que durante el cambio o transporte de cargas se genere la menor renovación de aire posible. Para ello, estas cámaras congelación se construyen mediante el uso de paneles frigoríficos, específicamente diseñados para este tipo de aplicaciones, que cuentan con el espesor y las características adecuadas, a la vez que se aíslan del suelo con cámaras congelación o cámaras de congelación de alimentos como las que ofrecemos en Tefrile.
• Eficiencia y eficacia: En este punto encontramos los equipos frigoríficos que elabora, diseña e implementa TFL. Bien sean para una cámara de conservación o de congelación de alimentos, cada instalación y equipo se diseña para cada tipo de producto y aplicación requerida. Por ello, es importante contar con unos saltos térmicos correctos, un dimensionamiento y distribución adecuada de los equipos que colaboren. Por ejemplo, a reducir la frecuencia y duración del desescarches o generar frío de manera eficiente (sistemas inundados).

Según la temperatura deseada para la conservación de estos productos perecederos, las cámaras de congelación y conservación de alimentos tienen las siguientes aplicaciones en la industria alimentaria:

• CÁMARAS POSITIVAS (Taint>0ºC). Son cámaras pensadas para almacenar productos frescos con el fin de evitar su congelación total o parcial. Estas cámaras de conservación suelen ser mucho más sencillas, puesto que no necesita realizar la tarea del desescarche. Indicar que suelen utilizarse para conservar todo tipo de alimentos: verduras, hortalizas, frutas, pescados, carne etc. pero siempre con un periodo de consumo corto.
• CÁMARAS NEGATIVAS (Taint<0ºC). En cuanto a las cámaras de refrigeración, estas están pensadas y son normalmente utilizadas para el almacenaje de todo tipo de productos congelados, tanto manufacturados como simplemente congelados. Por ejemplo, sirven para conservar alimentos 4a y 5a gama, pescados, carnes, pastas, pan, etc. que tendrán un periodo de consumo mucho más largo que en la cámara congelacion anteriores.